En las vísperas de la Epifanía del Señor o Fiesta de los Reyes Magos se piden cosas y éste día fue la excepción para mí y quizás para alguno que otro doliente el recibir las exequias de mi querido hijo (que en paz descanse), mi mayor deseo.
Iba de camino a la oficina postal cuando me dije a mí misma, si veo a un cartero le preguntaré, al ver entrando uno en la gasolinera esperé que detuviera el auto del correo y así preguntar. La amabilidad de ella no se hizo esperar y me dijo que había visto el paquete y enseguida llamó al correo, pasado el minuto le contestaron que me lo iban a poner al frente. Me preguntó ella que si tenía carro y le señalé donde estaba parqueada y amablemente se despidió dándome las condolencias.
Ya estando en la oficina postal por cierto abarrotadas en ésta época del año nuevo ví a la empleada, le hablé que había llamado la cartera y me dijo que esperara, atendió a dos personas mientras preparaban el comprobante de la firma de entrega y pasado unos minutos me lo traían, el cual firmé. Pues con dulzura y paciencia conmovida me hizo la pregunta de que si necesitaba ayuda y le contesté que sí, que si podía salir, estoy cerca de aquí, y me acompañó hasta el carro para acomodar bien con el cinturón de seguridad y nos abrazamos agradecidas.
En definitiva que Dios me puso dos ángeles en el camino. Hoy ha sido un día de bendiciones y amor fraterno. La luz del niño Jesús me alcanzó.
P. Luis Menéndez -Ése mismo regalo de reyes recibí yo un día cómo hoy del año 1999, las cenizas de mi madre EPD
oblatos -Pensé igual Padre, regalo de Reyes. Ésto pasa a los hijos de San Benito. Gracias muchas gracias por orar tanto por nosotros 🙏
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